
Me gusta caminar por la calle escuchando musica y observar a las personas que están al otro lado del paso de cebra. Esperan, como yo, a que se ponga verde el semáforo. Algunas se miran entre ellas, otras hablan por el móvil, unas se impacientan y yo me imagino cosas. Muchas cosas.
Hace unos días un grupo de chicos jovencitos turistas esperaban al borde de la acera. No puede dejar de imaginarme la cara de uno de ellos en pleno éxtasis orgásmico. Forzando las cejas, abriendo la boca y dejan caer un gemido desgarrado.
Ya no me sonrojo al sorprenderme enzarzada en estos pensamientos. Me gustan, y me siento identificada.
Ojalá alguien al otro lado del paso de cebra se imagine lo mismo conmigo.
Imagen: Nueva York, noviembre 2007
3 comentarios:
Cruza la calle orgullosa, medio mundo te desea. Simplemente lo sé.
Que seguro te veo...
Qué juguetona...Y tambíen suena Dire Straits mientras vas por la calle? O lo dejamos para las caricias...
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