jueves, 7 de mayo de 2009

El holandés errante con barba



A cada hombre que conozco lo asocio con un sentido.
Algunos, al tocarlos, me avivan el olfato. Otros, al mirarlos, me excitan el tacto. Y algunos, al olerlos, me corrompen la vista. Va como va.
Sin embargo hay uno que son todos los sentidos a la vez. Como el padre, el hijo y el espíritu santo. Olivier. Supongo que será porque ha sido el más duradero, el más presente, el más reciente. El más cojonero.
Pero el día del trabajador descubrí otro al que le asocio dos sentidos. Después de mis mesecitos de sequía y total desapetencia sexual, conseguí que mi bestia saliese de su letargo.

La barba de los hombres es todo un mundo. Y la suya un universo. Por eso su bello rubio en las mejillas rozando el interior de mis piernas fue todo un hallazgo. Olivier tenía barba, pero era suave, insulsa, diría. A Lucien le brota como pequeños dedos juguetones. Y yo, que me considero una mujer con poco bello corporal, con esa cosquilleante visita no podía ser menos que me volviese algo loca. Ahí estaba él, subido a mi nuca, cual loro, buscando mi boca. O deslizándose por el cuello buscando mis pechos. Y colgado de mis tobillos rebuscando con su magnetómetro. Y, lo dicho, acurrucado entre mis piernas en busca de mi perla.

Siempre me he preguntado cómo sería irse a la cama con alguien que no comparte tu mismo idioma. Y no hay tanta diferencia. Me atrevería a decir que es mejor. Los sonidos de un chino, de un ruso, un sudafricano y un canadiense son los mismos entre las sábanas. El quid del asunto viene cuando sueltan algún ruidito de más de dos sílabas.

Y entre la barba y palabras en holandés casi imperceptibles, como es evidente, me derretí entera.


Un tapiz del que me enamoré

4 comentarios:

Belén dijo...

Fíjate que yo soy de lampiños, las barbas me pican!

Besicos

Pablete dijo...

Siempre he dicho, que no hay nada mejor que los intercambios de culturas....ya sean literarios o follatorios....

A la única que no entendía, fue a una chica de Kenia...pero suspiraba como una española....y luego me pone mucho cuando una alemana dice: "Oh, mein Gott.." (oh, Dios mios..) o una finlandesa dice en inglés: "go on, you drive me crazy" (sigue, me estás volviendo loca)... jijijiji

Por cierto, llevo perilla y bigote....

Un besazo, hermosa.....

Sherezade dijo...

Como me gusta que activen todos mis sentidos. Estoy con Pablete que vivan los intercambios culturales.

Besos y disfruta de tu vuelta a los sentidos sexuales.

Anónimo dijo...

No tengo barba, ni demasiado bello de cintura para arriba, pero sí pelo, y también... un suave pincel con el que acariciar tu piel, mientras mi boca cuenta cosas... en silencio ;)